Que pena cuando la familia se convierte en un concurso de quien sale mas, quien gasta mas, quien come mejor. Lo mas importante, bonito y hermoso es la unidad y el amor que exista en la familia. Un pan compartido es mejor que un filete de concurso....
Que en estas navidades podamos aprender a compartir en familia, solo porque es familia. Sin importar el dinero, el lujo y la vanidad.
Tenemos que en estas fechas celebramos junto a nuestros seres queridos el nacimiento de nuestro redentor. El nacimiento del Niño Dios.
Hermoso es que ademas nazca en nosotros así como nació en la humildad de un establo en belén. Lo importante y valioso fue, es y sera siempre el amor de Dios que nos entrego a su hijo unigénito y de Jesús que acepto ser hombre como nosotros y venir a salvarnos. Lo demás pierde sentido.
En medio de todos los gastos reales e inventados que se realizan en las fiestas de diciembre, tengamos presente que llegara enero y que en enero también se viste, se come y se pagan las cuentas hechas por el despilfarro de diciembre.
Que el Señor nazca en nuestros corazones y en el corazón de todo ser viviente.
Amen,
Escrito por Solangel Rodriguez
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